viernes, 7 de agosto de 2015

3 MÉTODOS EFECTIVOS Y SIN QUÍMICOS PARA LIBRARTE DE LOS INSECTOS


¿Por qué es importante evitar los químicos en tus repelentes de insectos?

Los químicos en estos productos están hechos para matar a los insectos. Obviamente se requieren enormes cantidades para matar a un ser humano, sin embargo pueden permanecer en tu ambiente, adherirse a tu piel e impactar negativamente tu sistema inmunológico. Es mucho más sano dedicar unos pocos minutos a elaborar remedios caseros. Entre los más populares podemos destacar:



Hormigas: pepino, menta, pimienta de cayena y harina de maíz

Estos métodos dependen de que encuentres el lugar por el que las hormigas están entrando a tu hogar. Una vez que sigas los rastros que dejan las hormigas hasta dar con el punto de entrada, pon en práctica estas ideas para deshacerte de ellas para siempre:
Coloca unas rodajas de pepino cerca del punto de entrada. El olor las espantará
El olor de la menta también aleja a las hormigas. Algunas bolsas de te de menta podrían ayudarte a ahuyentarlas.
Rocía pimienta de cayena o harina de maíz cerca del lugar por el que entran. Las hormigas mueren al ingerir cualquiera de estos ingredientes.

Mantener alejados a los insectos cuando estamos fuera de casa

Los insectos pueden arruinar lo que al comienzo era una salida divertida. Utiliza este remedio para mantenerlos fuera de tu área:
En primer lugar, coloca una taza alcohol en una botella con atomizador. Agrega varias gotas de aceite de lavanda o de clavos de olor, ya que son esencias agradables para los humanos y rechazadas por los insectos. Rocía la mezcla alrededor del lugar en el que te encuentres.

Vinagre de sidra de manzana contra moscas de la fruta

Aunque ningún insecto es bienvenido en tu hogar, las moscas de la fruta pueden ser los peores. Son pequeñas, no tienen miedo de volar cerca de ti y se reproducen en masa. Usa este simple truco para sacarlas de tu vida:
Coloca aproximadamente un dedo de vinagre de sidra de manzana en el fondo de una jarra o recipiente.
Agrega una gota de jabón para lavar trastes.
Tapa la jarra con una lámina de plástico.
Haz algunos huecos al plástico con una aguja. Los insectos entrarán pero no podrán salir del recipiente.

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